Nunca una disciplina curativa tuvo tanta controversia y oposición. Resulta difícil comprender el por qué, ya que actualmente están demostrados científicamente los mecanismos curativos de tal práctica.

Su acción específica es restablecer una relación perfecta entre las partes articulares, es decir logra una acomodación funcional que, por diversos motivos, se alteró. Por Ej.: articulaciones esquinzadas, inmovilizadas por fracturas o cirugías; y en la actualidad, la exigencia del estrés de la vida que genera una contracción muscular sostenida que minuciosamente ejerce una fuerza anormal capaz de subluxar las articulaciones, configurando un síndrome doloroso y un pródromo de las artrosis y que debe ser reducido y solucionado con las correctas maniobras manipulatorias de la Quiropraxia.

Es indiscutible que la Quiropraxia se ha convertido hoy en día en el método más eficaz, indoloro y rápido para reducir articulaciones subluxadas, y disolver adherencias articulares de diversa índole que disminuyen el arco de movimiento provocando una funcionalidad anormal y una futura alteración de dicha articulación.

Hay otro gran capítulo de la Quiropraxia que es el tratamiento de la columna vertebral, donde no sólo logramos beneficios a nivel articular, sino también en el aparato neurológico. No nos olvidemos que la columna es la caja de la médula y las raíces nerviosas que se desprenden de ella .Por eso es muy común observar que al tratar síndromes lumbares en mujeres también se mejoren sus menstruaciones, sus evacuaciones; o al tratar la zona dorsal se observa la mejoría de síndromes respiratorios, etc. Volviendo a la temática de las controvertidas opiniones sobre esta medicina, creo que el tema no está en la Quiropraxia en sí, que como ya dije anteriormente es científicamente indiscutible, sino en los quiropractores, su formación, su capacidad y su don.

Insisto sobre este ítem ya que aquí se hace fundamental la correcta y exhaustiva formación (no información) y la correcta práctica de quienes quieran ejercerla. Aquí se impone que sea efectuada por manos de un maestro quiropractor, con una larga trayectoria, para lograr efectos benéficos en sus pacientes, en forma individual, además como docente hay que llevar al alumno a una exitosa práctica que promueva el aprendizaje y la adquisición de las diversas maniobras.

Sobre el autor
Omar Arriaza
Profesor Kinesiólogo
kinesiologoarriaza@yahoo.com.ar

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