Las expectativas constituyen el deseo de producir un resultado o acontecimiento determinado.
Nos permiten diseñar nuestra vida, influyen en nuestro comportamiento, están condicionadas por nuestras creencias, sean estas expansivas o limitantes.
Cuando tenemos expectativas de logro nos sentimos confiados frente a los objetivos que nos proponemos, nos motivamos, aceptamos los desafíos, descubrimos nuestro potencial, liberamos energía, tenemos sentimientos esperanzadores y reforzamos nuestras creencias expansivas.
La ausencia de expectativas conduce a la desesperanza, apatía, impotencia, ausencia de mérito, insatisfacción, incapacidad de liderar nuestra vida, nuestras creencias son limitantes.
Richard Bandler cofundador de la PNL dice ‘’Los contratiempos requieren una planificación adecuada’’. Cuando nos anticipamos con una expectativa de éxito o fracaso ésta se convierte en una profecía de auto-realización.
Para la PNL las expectativas son un ejemplo de la relación entre nuestro mapa de la realidad, mundo interno y la realidad misma, el mundo externo. Cuando tenemos expectativas esperamos que el mundo se adapte a ellas, muchas veces cuando no hay correspondencia entre ambos se producen conflictos internos. En este aspecto la PNL nos proporciona herramientas para trabajar sobre ellas directamente. Cuanto más pueda vivenciar una persona (ver, oír, sentir) un estado deseado, más poderosas serán sus expectativas, por el contrario si disminuyen las representaciones sensoriales las consecuencias se debilitarán. Por ello constituyen un marco muy poderoso para nuestras experiencias.
“Nadie se eleva más allá de sus expectativas. Si aspiras poco de ti darás poco. Si piensas en grande alcanzarás grandezas”
Sobre la autora:
Lic. Juana Noli
Trainer PNL – Coaching
juananoli@yahoo.com.ar
www.cambioconpnl.com.ar

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *