Veterinario en casa
En nuestra profesión muchas veces nos cuentan o revisamos al perrito o gato que se pierde o se escapa por un tiempo y vuelve.
Hay tenedores responsables que tienen a sus mascotas contenidas los pasean atados a su correa. Pero otros que los pasean sueltos o en un descuido por la confianza se les escapan por un susto, un ruido, etc. Otros no tan responsables dejan a su mascota atada mientras compran en un supermercado y se les suelta o se lo sueltan.
¿Qué le pasa por la cabeza a esa persona cuando no está su mascota donde la dejó? ¿Qué ocurre en esa mascota que corre desesperada?
Unos se orientan y regresan y otros…
En el interior mucha gente deja a su mascota que se autopasee. Son formas de convivir con los de 4 patas. Responsabilidad: cada uno sabe que significa. El problema es que no siempre vuelve y uno se pregunta por qué en unas ocasiones sí regresa y otras veces no es así. Comencé con lo de la energía que generaba la vida. Sigo con esto de la energía. Hace años que se estudia sobre el GPS (el método de orientación de los animales), aves que regresan a su sitio después de migrar kilómetros para reproducirse. De la capacidad de orientación de las palomas mensajeras. ¿Cómo se orientan?
Pero también lo hacen los perros y los gatos que después de días reaparecen. Algunos no tuvieron la suerte de cruzarse con personas samaritanas, que con gran empatía los ayudan, pero los desvían de su orientación y ahí terminan perdiéndose para siempre y ya no regresan a sus hogares. Si los dejamos solos, la mayoría llega a su casa. La mayoría vuelve.
Como Tronco un bóxer que nunca salía de la casa porque los niños, sus dueños, y sus padres, no lo podían sacar por lo atolondrado de su comportamiento, tal que se hacía imposible. Tronco vivía en un canil grande de unos 12m2, más una cucha grande. Un día se fueron de vacaciones y se lo dejaron al cuidado de una tía que quiere a los animales que vive a 15 cuadras. El día antes de sus vacaciones lo llevaron en auto a lo de la tía. A los días Tronco se escapó, lo corrieron, cuanto más lo corrían y le gritaban, más rápido corría Tronco.
Pedían a gritos a la gente: “¡Agárralo!” Y Tronco más rápido se alejaba. Olfateaba y si alguien se acercaba corría y se alejaba. Fue así hasta que lo perdieron de vista, y en la dirección contraria a su casa.
Muchas veces atendí a pacientes como este. ¿Qué les pasa? En su forma de ser tienen ese chip que los lleva a conocer otros lugares, podríamos pensar es un aventurero, o sólo se escapó. Quería estar con sus dueños, extrañaba su casa, son conjeturas, nadie sabe ¿por qué? O tienen un chip del miedo y por pánico corren, huyen, se espantan durante las tormentas o explosiones de pirotecnia, ruidos desconocidos, por la gente, etc. Nadie lo sabe y se pueden escribir muchas historias.
Su chip gregario en los perros no funciona bien. Huyen por miedo, terror. Otros tienen esa combinación de terror que se escapan y luego se paralizan y alguien lo agarra. Pero esa mascota por algo desconocido se encuentra en una situación estresante, sufre un shock, perdido, desorientado. Nadie lo sabe. Para mí el error inmediato de tratar de retenerlo, de ayudarlo, lo llevó a desorientarse aún más. Si lo dejamos la mayoría hace como Tronco o como muchos otros que no se cruzaron con esas personas. Luego cuando los atendemos tenemos que sacarlos del shock, rescatar su estado energético, con homeopatía o flores y tratamos ese síntoma tan particular que lo lleva a cambiar definitivamente de vida, de casa o de compañero. Como nadie quiere perder lo que tiene, muchos ni quieren publicar que encontraron un animal.
Desde la homeopatía tenemos rubros en el repertorio. Como el sentimiento de abandono. Que no es igual al de ser abandonado. La tentativa de escapar, el de correr, irse. Lo que vemos en esas mascotas es que, corren, se asustan, manifiestan temor. Pero no sabemos si sienten ser abandonadas, si se sienten perdidos. Lo que tenemos claro es que no están con los que vivían.
Hay flores que ayudan en la desorientación como Corn, a los cambios de vida, Willow. La mayoría de los gatos silvestres son agresivos, el domestico se entrega, se deja agarrar.
¿Después que pasa?
Me puse en su lugar y creo que pensarán: “Me capturo un ovni y me llevo al medio del universo con individuos de diferente tamaño que el mío”. A Tronco lo buscaron por todo Lomas de Zamora con el auto y al pasar por la casa de los sobrinos (recordemos que lo habían dejado de la tía para las vacaciones) lo vieron sentado a la puerta esperando que le abran. Así lo hicieron.
Muchos corren detrás de una mascota perdida y tratan de capturarla cuando ellas quieren ir a donde nadie sabe. Ojalá se encuentren con sus tenedores y ellos aprendan. Que no vuelva a pasar y pongan en el pretal o su collar identificación y teléfono.
Sobre el autor:
Carlos Francisco Angeleri
Veterinario
angelericfmv@gmail.com

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