La sangre es la vida misma. Es mágica, es alquímica. No sólo proporciona los complejos sistemas de aprovisionamiento y defensa necesarios para nuestra propia existencia sino los desplazamientos y agrupamientos de nuestros antecesores y la forma en que se adaptaban al ambiente, las dietas y los gérmenes.
Los diferentes grupos:
Grupo O el cazador : el más antiguo y más básico, cuando todos pertenecían a ese grupo y ocupaban un espacio concentrado, comían la misma dieta y respiraban los mismos organismos. Aún hoy es el tipo de sangre predominante, con un sistema inmunológico resistente e ingobernable dispuesto y capaz de destruir a cualquiera.
Grupo A el agricultor: es el de los primeros inmigrantes forzados por la necesidad a adaptarse a estilos de vida agrarios, con una personalidad más cooperativa para adaptarse a las comunidades multitudinarias.
Grupo B el nómade: es el asimilador, adaptado a los nuevos climas y a la mezcla de poblaciones al emigrar las razas desde África hacia Europa, Asia y América. Se originó en la región del Himalaya y en los Urales entre las tribus caucásicas y mongoles. Representa la búsqueda de un equilibrio entre las tensiones de la mente y las exigencias del sistema inmunológico.
Grupo AB el enigma: se encuentra en menos del 5% de la población. Apareció unos mil años atrás luego de una gran migración de pueblos orientales hacia Occidente. Es una rara fusión entre el tolerante tipo A y el tipo B de origen bárbaro, pero más equilibrado.
Los tipos A y B no tienen más de 15.000 a 25.000 años de antigüedad y el tipo AB es mucho más reciente. La sangre del Sudario de Turín es del grupo AB.
Características Generales del Tipo 0
Las personas con sangre del tipo 0 en general presentan un sistema inmunitario potente y muy activo, tendencia a una actividad tiroidea lenta, dificultad de adaptación a nuevas condiciones ambientales y nutricionales, bienestar con actividad física o deportiva regular e intensa y un aparato digestivo muy eficiente capaz de metabolizar dietas ricas en proteínas (carnes magras, pescado y mariscos).
Alimentos que le son muy beneficiosos:
1) Consumir frutas y verduras en abundancia pero reducir el consumo de las crucíferas (coliflor, coles )y las hortalizas de la familia de las solanáceas (berenjenas, papas, etc.) excepto los tomates.
2) Consumir carnes magras equilibrando con verdura. Deben evitar la carne de cerdo y los embutidos.
3) Consumir pescados y mariscos a excepción de pulpo, salmón ahumado, arenques, caviar y pescado salado, secado o en conserva.
4) Limitar o evitar el consumo de leche, lácteos, quesos y huevos. Están en cambio permitidos la manteca, los quesos frescos magros y los quesos de soja.
5) Eliminar todo producto que contenga trigo y limitar los que llevan maíz y cereales.
6) Evitar las bebidas gaseosas, las colas y el café prefiriendo el té.
7) Practicar alguna actividad física de forma regular. Les van mejor los deportes competitivos que requieren intenso esfuerzo físico.
8) En presencia de problemas utilizar productos fitoterapéuticos o infusiones de diente de león, menta, fucus, tilo. Evitar equinácea y áloe.
9)Frutas: Las frutas moradas causan una reacción alcalina que equilibra la acidez en su tubo digestivo. ciruelas moradas, higos frescos o secos
Cabe añadir que los alimentos que favorecen el aumento de peso en las personas del tipo 0 son el gluten del trigo, el maíz, las lentejas y las crucíferas (coles, coliflor y coles de Bruselas). Por el contrario, favorecen la pérdida de peso las algas marinas, la sal yodada (de forma muy moderada), los pescados y mariscos, la carne de hígado, las espinacas y el brócoli.
Características Generales del Tipo A
Las personas con sangre del tipo A presentan un sistema inmunitario vulnerable, una buena adaptación a condiciones ambientales y nutritivas estables, bienestar con una actividad física o deportiva relajante, un aparato digestivo frágil que tolera mal la carne, la harina de trigo, la leche y los lácteos, y al que le va mejor una dieta vegetariana rica en cereales y legumbres.
Las personas del tipo A deberían pues:
1) Basar su dieta en el consumo de fruta, cereales, legumbres y verduras.
2) Consumir pescado sólo en pequeñas cantidades (carpa, mero, bacalao, merluza, salmón, sardina, trucha) excluyendo los pescados planos como el lenguado.
3) Limitar o evitar el consumo de carne evitando los embutidos, las carnes en conserva- y los alimentos salados o ahumados.
4) Evitar el consumo de leche y productos lácteos. En cambio, la soja y sus derivados le son particularmente beneficiosos.
5) No consumir alimentos precocinados.
6) Consumir de forma habitual semillas oleaginosas y frutos secos pero evitando las nueces brasileñas y los pistachos.
7) Reducir el consumo de productos a base de harina de trigo.
8) Practicar actividades físicas relajantes (yoga, Tai-Chi, bicicleta, natación, excursiones…).
9) Utilizar en caso de malestar productos fitoterapéuticos o infusiones de manzanilla, equinácea, valeriana, áloe.
10)Frutas:
Cabe agregar que los alimentos que favorecen el aumento de peso en las personas del tipo A son las carnes, los alimentos lácteos, el exceso de trigo favoreciendo el adelgazamiento los vegetales, los aceites vegetales, la soja y la piña.
Características Generales del Tipo B
Las personas con sangre del tipo B presentan un sistema inmunitario activo, facilidad de adaptación ambiental y nutricional, bienestar con actividades físicas o deportivas moderadas y equilibradas, y un aparato digestivo eficiente que le permite seguir una dieta variada y equilibrada con leche y lácteos pero que posee poca tolerancia a los embutidos, la carne de cerdo, los mariscos, las semillas y los frutos secos.
Las normas generales a seguir por las personas del tipo B serían:
1) Llevar una dieta variada y equilibrada.
2) Consumir abundantes frutas y hortalizas de hojas verdes.
3) Consumir carnes magras pero evitando el pollo el cerdo y los embutidos.
4) Consumir pescado evitándo los mariscos,la langosta, los mejillones, las ostras, las almejas, el pulpo, las anchoas, la anguila y los caracoles.
5) Consumir huevos, leche y productos lácteos (es el único grupo que los tolera bien).
6) Limitar los productos a base de trigo y maíz.
7) Limitar el consumo de semillas y frutos secos.
8) Practicar actividades físicas moderadas y equilibradas como los ejercicios aeróbicos, la bicicleta, la natación, el yoga o el tenis.
9) Utilizar en caso de malestar productos fitoterapéuticos o infusiones de salvia, menta, ginseng, evitar tilo y áloe.
En cuanto a los alimentos que favorecen el aumento de peso en las personas del tipo B son el maíz, las lentejas, los maníes, las semillas de sésamo, el trigo y el trigo sarraceno favoreciendo el adelgazamiento los vegetales de hoja verde, la carne -especialmente la de hígado-, los huevos y los lácteos.
Características Generales del Tipo AB
Las personas con sangre del tipo AB presentan un sistema inmunitario vulnerable, facilidad de adaptación a las condiciones de vida modernas, bienestar con una actividad física o deportiva relajante que exija esfuerzos moderados y un aparato digestivo frágil que precisa una dieta mixta moderada y tolera mal las carnes rojas, la pasta, los porotos y los frutos secos.
Las normas generales a seguir por las personas del tipo B serían:
1) Limitar el consumo de carnes rojas y evitar las carnes ahumadas y los embutidos.
2) Consumir pescado y mariscos evitando la langosta, las ostras, las almejas, el pulpo, las anchoas y la anguila.
3) Evitar el consumo de productos a base de harina de trigo y limitar el consumo de pasta.
4) Consumir leche, lácteos y quesos… salvo cuando al hacerlo haya producción excesiva de moco con afecciones de las vías altas respiratorias. En tal caso deben suprimirse.
5) Consumir frutas -especialmente ciruelas, uvas, piña y frutas del bosque- y hortalizas en abundancia -sobre todo tomate-.
6) Preferir las grasas vegetales –sobre todo el aceite de oliva- evitando el vinagre.
7) Eliminar los encurtidos y la pimienta.
8) Preferir las actividades físicas y deportivas relajantes que exijan sólo esfuerzos moderados.
9) En caso de malestar utilizar productos fitoterapéuticos o infusiones de manzanilla, equinácea, evitar tilo y áloe.
Favorecen el aumento de peso en las personas del tipo AB las carnes rojas, el maíz, el trigo, el trigo sarraceno, los porotos y las semillas de sésamo mientras favorecen el adelgazamiento las verduras, las algas marinas, los pescados, los lácteos, la piña y el tofu.
Investigación: Vera Alaniz
Fuente: Libro: L os grupos sanguíneos y la alimentación. Dr. Peter J. D’Adamo (Javier Vergara Editor)