De la misma manera que tratamos de armonizar nuestra salud con la naturaleza, para una vida más saludable, se recomienda hacerlo con el cabello.
Quienes afirman que el cabello tiene caídas estacionales –en función de la época del año– sostienen que el período en que más se cae el cabello es en el otoño. Dos factores son los principales para explicar el porqué de la caída.
Por un lado, se fundamenta que el pelo, en el período estival, se afecta por agentes climáticos y ambientales: los rayos del sol, las altas temperaturas, el mar, la playa, la pileta (cloro). Tales lo fragilizan, lo resecan, enredan, decoloran y dañan su cutícula. Hay también una activación de las glándulas sudoríparas, por el calor, que aceleran la actividad metabólica del pelo y, de este modo, afectan sensiblemente la salud de nuestro cabello.
Un cabello que ya viene debilitado desde el verano, al llegar el otoño y afrontar el frío, está expuesto a las inclemencias del tiempo con mayor facilidad. Y es a partir de ahí que se justifica su caída, de un modo y en una cantidad que excede lo habitual.
En primavera
Los ciclos de la naturaleza y del pelo se asemejan y se combinan: Las puntas del cabello florecen como las plantas con sus flores y hojas, pero su crecimiento es mayor; tenemos que atender estas puntas, mejorarlas, recomponer la cutícula para mantener la salud capilar.
En los cambios de estación es muy recomendable reforzar con vitaminas, aminoácidos, oxigenación, baños capilares, terapias de ozono, pantallas capilares, no sólo por caída de cabello, sino también para mejorar el existente.
Es normal la renovación del cabello, dado que se mantiene en fase anágena de 2 a 6 años en nuestro cuero cabelludo; si la caída no excede los 30 cabellos diarios, la alopecia no aparece.
Cuando este recambio no se produce de manera ordenada podemos pensar que ocurre algo anormal que necesita tratamiento, pero no se debe entrar en pánico, ya que se trata muchas veces de los tiempos y ciclos naturales de renovación del pelo.
Independientemente de mito o realidad de la caída estacional, se sugiere cuidar el cabello de modo constante, incluyendo en nuestra alimentación todos los nutrientes necesarios para tener un pelo sano y fuerte.
En los casos de caída de cabello sostenida, consultar a un profesional que sepa indicar el tratamiento apropiado a su situación. La caída de cabello debida a enfermedades, requieren de tratamiento medicinal.
Sobre la autora
Enriqueta Irma Resúa
Titular de Enriqueta Healthy Natural
Línea Biológica de Recuperación Capilar
enriquetainfo@gmail.com
