Las mascarillas de arcilla son muy utilizadas como tratamiento de belleza, ya que tienen la particularidad de dejar la piel libre de impurezas devolviéndole su elasticidad y tonicidad a la piel.
Los tratamientos hechos con diferentes arcillas ya eran utilizados en la antigüedad como una práctica terapéutica, sobre todo en el antiguo Egipto y se la armonizaba con tratamientos de aromaterapia. Todas estas recetas, tanto de sustancias como de su preparación, han llegado a nuestros días y por medio de algunos ajustes la cosmética moderna los ha puesto al servicio de la belleza.
Para preparar la arcilla que luego aplicaremos en forma de mascarilla, es posible utilizar aceites esenciales y gel neutro no siendo necesario agregar agua para la formulación de la misma.
Se colocarán tres gotas de aceite esencial por cada 10 gramos de gel neutro mezclando unos 20 gramos de arcilla siempre dependiendo del tratamiento a realizar. La pasta debe ser homogénea para facilitar su aplicación.
Los aceites esenciales tienen por finalidad ayudar a crear diferentes tipos de mascarilla y a partir de una mezcla básica es posible crear una rutina de tratamientos personalizados haciendo una combinación de máscaras distintas.
Así es posible lograr una mascarilla hidratante que es posible aplicarla secuencialmente con una blanqueadora.
- Pieles grasas o mixtas: para esta mascarilla de arcilla se mezcla la arcilla con aceite esencial de menta y aceite esencial de ciprés. Esta máscara es astringente y refrescante, combinando una micro-exfoliación de la arcilla con un efecto tensor propio del aceite de ciprés que también es astringente. Esta mascarilla tiene acción descongestionante y refrescante por el agregado del aceite esencial de menta, otorgando a la piel una suave sensación de frescura y controlando también la oleosidad excesiva típica de este tipo de pieles.
- Pieles sensibles, manchadas o deshidratadas: para estas pieles la mascarilla ideal es la de arcilla mezclada con aceite esencial de lavanda y aceite esencial de palma rosa. Se trata de una mascarilla súper hidratante que además tiene un efecto regenerador y que combina su poder cicatrizante como revitalizante. Otorga suavidad y aclara la piel devolviéndole su luminosidad, siendo excelente para pieles envejecidas y con aspecto de cansancio.
- Para pieles mixtas y sin vitalidad: se utiliza la arcilla a la cual se agrega aceite esencial de naranja, lavanda y mirra. Además de una exfoliación suave y nutritiva, ayuda en el tratamiento de marcas finas de expresión, pieles manchadas y con falta de vitalidad.
También se utilizan las mascarillas de arcilla para realizar una renovación celular. En estos casos, la más utilizada es la arcilla Tierra Madre, ya que posee un efecto nutritivo, estimulante y regenera la piel. Es especialmente indicada para pieles con poca vigorosidad.
Para preparar la mezcla de la arcilla, se adicionará aceite esencial de jengibre y de copaiba que posee efecto cicatrizante y desinfectante, especial para aquellas pieles con acné. Potencia además la renovación celular y que en forma conjunta con su acción exfoliante deja la piel notablemente más suave y luminosa.
La mascarilla de arcilla tiene efectos antiinflamatorios; mezclada con aceite esencial de geranio, romero y de lavanda ayuda a equilibrar las pieles que sufren de acné.
Nota: Antes de aplicar cualquier producto sobre una piel sensible es necesario realizar el test de sensibilidad, y con más razón cuando se trata de una mascarilla de arcilla.
Para más información sobre Arcilla Tierra Madre:
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