El origen la Melisa es del área mediterránea y de Asia, aunque hoy en día puede encontrarse naturalmente en zonas húmedas o incluso en praderas sombrías.
Es un arbusto de alrededor de 60-90 cm de altura. La parte aérea puede morir en invierno, pero de su raíz perenne brotarán todos los años nuevos brotes. Los tallos se ramifican desde la base. Las hojas son grandes, pecioladas y con márgenes dentados, de color verde claro brillante. Esta planta desprende un característico olor a limón. Las flores aparecen en verano y son color blanco o rosado.
Cultivo
La melisa es una planta de cultivo muy sencillo. Se adapta a cualquier tipo de suelo, aunque lo prefiere fértil y permeable, exposición soleada, pero con algo de sombra en regiones de verano muy cálido. Se da en cualquier suelo bien drenado y tolera sin problemas los suelos pobres y arenosos donde el sol da con intensidad. Sólo habrá que cortar los tallos que se pudran durante el otoño y remover la tierra próxima a las raíces. Se adapta a terrenos donde da un poco de sombra. De hecho, las hojas que tienen mejor color son las de aquellas plantas que se cultivan parcialmente a la sombra. En los climas muy cálidos, para que la planta se desarrolle correctamente deberá recibir sombra durante las horas centrales del día. Es una planta que tolera muy bien los periodos de sequía y que no se debe regar apenas durante el invierno. Como es una planta que tolera bien los suelos pobres y secos irá muy bien para plantarlas al borde de un camino o sendero en el jardín. Así, su fragancia impregnará el aire a medida que se pasea. Es necesario el abonado mineral todos los años. Se puede tener la melisa o toronjil fresco todo el año si se planta en macetas para evitar que se extienda de forma excesiva haciéndose invasiva. Para usar las hojas frescas se cortan las más tiernas. Están disponibles casi todo el año.
Usos culinarios
La Melisa no destaca por sus cualidades estéticas, sino por sus cualidades herbales y aromáticas. Sabor agradable y fresco, a limón. Sus hojas suelen utilizarse para dar aroma y sabor al té tanto frío como caliente. También se utilizan las hojas para condimentar platos como substitutivo de la cáscara del limón. Las hojas se utilizan, tanto frescas como secas, para aromatizar ensaladas, salsas, sopas, platos de verduras, postres y confituras. En la cocina, su sabor alimonado da frescor a las comidas. Las hojas se utilizan en la preparación de ensaladas. Las hojas secas se preparan en infusión a manera de té. Se usa en la preparación de licores y también en la fabricación de cosméticos.
Usos medicinales
La melisa es renombrada principalmente como hierba relajante y buena para el corazón. En la medicina popular se usa contra la ansiedad y la depresión así como para calmar las palpitaciones del corazón. Hoy día se aprecia todavía como tisana tónica y sedante que, según la leyenda, contiene la fórmula de la longevidad. Una infusión de sus hojas calma los nervios, estados de ansiedad leve, hiperactividad o irritabilidad. Ayuda a calmar dolores de cabeza, migrañas y jaquecas, en especial de origen nervioso. Indicada en trastornos del sueño de origen nervioso. Ayuda a controlar la tensión arterial. Equilibra los altibajos emocionales que a veces se presentan en la menopausia, sube el ánimo y disipa la melancolía. Calma los dolores de la menstruación, ayudando en su regulación. Tonifica y ayuda a relajar los músculos, y evita la aparición de espasmos. Para mitigar el mal aliento, masticar unas hojas de Melisa. Es un efectivo repelente de insectos, y alivio de picaduras. Además tiene propiedades astringentes, es anti espasmódico, tónico nervioso y muscular, carminativo, coléretico, digestivo, aperitivo, antiséptico, antiviral y cicatrizante. Las pieles grasas mejoraran su aspecto, si cada noche nos lavamos la cara con una infusión ligera de Melisa. Está indicada para la regulación y tratamiento de trastornos gástricos, estimula la secreción biliar, favorece la eliminación de gases, favorece la digestión, alivia el dolor de estómago y vómitos, causado por nervios, y actúa con eficacia contra los mareos y las náuseas.
Para TodoSalud
Vera Alaniz
Fuente: www.ecoagricultor.com