La sociedad de consumo nos empuja a relacionar la acumulación de cosas con la felicidad.
Con la publicidad de grandes ofertas nos dicen que con tal o cual cosa podemos satisfacer todas nuestras necesidades.
Los descuentos en un fin de semana crean la necesidad permanente de consumir cosas innecesarias, desde el punto de vista ético.
En fechas como las fiestas de fin de año, queremos poner en valor algunas costumbres como el encuentro con familiares y amigos que llevamos tiempo sin ver, el cocinar y compartir en torno a la mesa.
Cada vez que compramos algo que pocas veces usaremos, estamos creando un residuo que habrá que gestionar. Para que tengamos una Navidad diferente, lejos de las tradicionales fiestas del consumo irresponsable y de gran impacto ambiental
Te dejamos una guía de compras para una Navidad diferente, más respetuosa con nuestro medio ambiente:
- COMPRA CON ÉTICA
Cuidando el planeta, acorde a tu capacidad económica, regalos sin plásticos.
- COMPRA LOCAL
Cuando comprás en un pequeño comercio la economía local se revitaliza.
- CREÁ
Intentá regalar cosas útiles, una creación propia no es tan complicada: una tarta, una comida, algo especial y lleno de dedicación para alguien que vive solo.
- COMPRÁ DE SEGUNDA MANO
Practicá el intercambio, el trueque, visitá ferias americanas. Encontraremos tesoros que otros ya han disfrutado.
- REGALÁ MOMENTOS Y EXPERIENCIAS EN LUGAR DE COSAS
Una cena, un desayuno, un paseo especial, una sesión de masaje.
Jugá al amigo invisible, pensá en la persona y buscá qué le podría gustar y sea útil para ella.
¿Qué necesitamos realmente?
¿Tener muchas cosas nos da la felicidad?
Aporte de TodoSalud para la comunidad, Ana Muñoz